Esta Iglesia existe por la gracia y para la gloria de Dios, lo cual será el fin último de todas sus actividades. Buscaremos glorificar al Dios de las Escrituras (Ef. 3:21) mediante la promoción de su culto (Juan 4:23,24; 1 Cor. 3:16,17; 1 Ped. 2:5); edificante y equipando a los santos (1 Cor. 12:27,28; 14:12,18,19,26; Ef. 4:11-16); el evangelio de Cristo tanto a nivel local y en todo el mundo (Mat. 28:18-20; Lucas 24:46-48; Hechos 1:8; Hechos 13 y 14); buscando siempre que sea posible a tanto plantar como fortalecer otras iglesias, promoviendo la fidelidad bíblica y pureza en todas las asambleas de Cristo (Hechos 15:36,41; Hechos 16:5; Judas 3); buscando dar alivio a los necesitados, especialmente a los santos (Rom. 15:26,27; Gal. 2:10; Gal. 6:10), y a los huérfanos, viudas y demás necesitados.